Por Monika Dimitrovska
¿Hachiko está basada en una historia real? ¡Sí! Sin embargo, su verdadera historia no es exactamente la que se representó en la película estadounidense de 2009 "Hachi: A Dog's Tale" traducida al español como: “Siempre a tu lado, Hachiko.”
Hay algo en la historia de Hachiko que cautivó al mundo, incluyéndome a mí. Su lealtad es inspiradora.
Hachiko fue el perro más leal que esperó a que su dueño fallecido regresara del trabajo en la estación de tren durante casi una década.
Su fidelidad inspiró a millones de personas en todo el mundo, incluyendo películas como la mencionada, sin embargo, su verdadera historia es mucho más interesante y desgarradora.
¿Cuál es la historia verdadera sobre Hachiko?
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Hachiko no nació en Tokio.
A pesar de la creencia popular, Hachiko no nació en Tokio, sino en la ciudad de Odate, en la prefectura de Akita. Su cumpleaños es el 10 de noviembre de 1923. Hachiko fue el octavo cachorro de una camada nacido de su padre Oshinai (el nombre de la zona en la que vivían) y su madre Goma (que significa 'sésamo').
Hachiko era un perro Akita de raza pura que se vendió por 30 yenes, que era una suma de dinero respetable en ese momento. Fue comprado por Hidesaburo Ueno, profesor de agricultura de la Universidad de Tokio.
Aunque los perros de raza pura no son mejores que los mestizos, el profesor realmente quería un Akita-inu de raza pura. Curiosamente, Hachiko fue uno de los pocos perros de raza pura que quedaban de esta popular raza de perro antigua en Japón durante su vida.
Después de ser comprado, lo subieron a un tren y llegó a su nuevo hogar, Tokio, unas 20 horas después.
El profesor nombró al perro 'Hachi' en honor al número 8, que se asocia con la suerte en Japón. El sufijo -kō, originalmente para los duques chinos, se agregó cariñosamente al nombre Hachi, haciendo que "Hachikō" signifique aproximadamente "pequeño Hachi".
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Después de entrar en la casa de Ueno y su pareja, Yaeko Sakano, Hachiko desarrolló el hábito de seguir a Ueno al trabajo. De hecho, lo seguía hasta la estación de Shibuya y esperaba su regreso todas las noches.
Como probablemente ya sepas, esta historia no tiene un final feliz. El 21 de mayo de 1925, dos años después de tener a Hachiko, Ueno no regresó del trabajo. Desafortunadamente, había sufrido una hemorragia cerebral y murió, para nunca más volver a casa con su amado perro.
Se dice que los perros tienen un sexto sentido. Aún así, Hachiko no podía comprender su pérdida y siguió regresando a la estación todos los días.Triste pero cierto y admirable, Hachiko esperó a que su dueño regresara a la estación por el resto de su vida: un total de 9 años, 9 meses y 15 días.
Después de la muerte del profesor, fue vivió en diferentes hogares a lo largo de los años. Sin embargo, él, como cualquier perro con un fuerte sentido del olfato, encontró el camino de regreso a la estación de tren, con la esperanza de volver a ver a su dueño.
Eventualmente, fue adoptado por el antiguo jardinero de Ueno, Kikuzaburo Kobayashi. No se sabe por qué la pareja de Ueno no se quedó con él. Afortunadamente, la casa del jardinero estaba más cerca de la estación que las casas anteriores de Hachiko, lo que hacía que su viaje fuera más corto. Esto le permitió regresar al ahora popular lugar donde solía saludar a Ueno todos los días.
Hirokichi Saito juega un papel muy importante en la historia de Hachiko porque gracias a él, sabemos la historia de este perro tan especial. Un día, el estudiante de Ueno vio al perro esperando en la estación y lo siguió a casa.
Continuó visitando al perro en la estación y escribió varios artículos más sobre su lealtad a lo largo de los años. Esto convirtió a Hachiko en una sensación nacional y en uno de los mayores héroes caninos de todos los tiempos.
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Después de casi 10 años de esperar el regreso de su dueño, Hachiko lamentablemente falleció el 8 de marzo de 1935 en una calle de Shibuya.
El perro de 11 años tenía cáncer terminal y una infección por filaria (uno de los parásitos más comunes en los perros). Además, se encontraron cuatro brochetas de yakitori en el estómago de Hachiko, más sin embargo, estas no dañaron su estómago ni causaron su muerte.
Hachiko, fue incinerado y sus cenizas fueron enterradas junto a las de Ueno en el cementerio de Aoyama, Minato.
En la actualidad, Hachiko tiene rutas de autobús que llevan su nombre
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En de la ciudad de Shibuya operan rutas de autobús llamadas "Hachiko Bus" en honor al perro. Utilizan minibuses cubiertos con la imagen de Hachiko a los que puedes llegar a tu destino y recordar al perro más leal de todos.
El 8 de abril es el Día de Hachiko en Japón
En Japón, se celebra la memoria de Hachiko el 8 de abril.
Hachiko falleció un 8 de marzo, pero su ceremonia conmemorativa tuvo lugar un mes después para coincidir con la temporada de los cerezos en flor.
Puedes asistir a este evento en la estación de Shibuya en honor a Hachiko, junto con cientos de otros amantes de los perros y sus perros de diferentes razas que asisten regularmente.
El 100 aniversario de Hachiko fue en 2023
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El cumpleaños de Hachiko es motivo de celebración en Japón, y en 2023 se cumplió su primer centenario de su nacimiento.
Su ciudad natal inició el "Proyecto HACHI100" en 2022, celebrando su cumpleaños número 99 como una cuenta regresiva para el centenario. El proyecto incluyó merchandising especial y eventos por tiempo limitado dedicados a honrar a Hachiko.
Probablemente hayas visto la película estadounidense de 2009 "Siempre a tu lado, Hachiko," lo que hizo que Hachiko fuera muy popular. Si no es así, te sugerimos que también veas también Hachiko Monogatari (1987), traducida al español como “Hachi-ko” la película original primero, ya que describe la vida del perro con mucha más precisión.
La historia de Hachiko es una historia de afecto, resistencia y un de fuerte vínculo entre un perro y un hombre que ni siquiera la muerte puede separar.
Sigamos recordando y honrando a este perro especial que cambió la forma en que el mundo ve el amor entre las personas y sus amigos peludos.
Nota final: Los japoneses consideran que los Akitas son excelentes perros guardianes porque son extremadamente leales, alertas y territoriales. También son una de las razas de perros más tranquilos. Sin embargo, si estás pensando en adoptar tu propio Hachiko, recuerda que los Akitas no son fáciles de cuidar. Por el contrario, son perros de alto mantenimiento.
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